Hepatitis A

Hepatitis A

La hepatitis A es una enfermedad infecciosa aguda producida por el virus de la hepatitis A (VHA). La infección VHA puede dar lugar a formas inaparentes (asintomáticas y sin aumento de las enzimas hepáticas), subclínicas (asintomáticas con aumento de las enzimas) y clínicas, en las que las manifestaciones abarcan desde un período de síntomas inespecíficos, como falta de apetito, náuseas y malestar general, hasta la ictericia (color amarillo en la piel y mucosas) y signos de lesión hepática, con hepatitis fulminante en menos del 0'5% de los casos. La duración de los síntomas es variable, de entre una y dos semanas hasta varios meses en las formas graves. No se sabe que se produzca infección crónica.

La enfermedad, que tiene un período de incubación (tiempo transcurrido entre el contacto con el virus y el inicio de los síntomas) de entre 15 y 50 días, con el promedio en 28-30 días, suele ser muy leve en niños y más grave en los adultos, en los que no es rara la hospitalización.

El modo más común de transmisión del VHA es persona a persona, por vía fecal-oral, y los brotes ("brotes" o "outbreaks") suelen relacionarse con el consumo de agua contaminada, de alimentos contaminados por los manipuladores infectados, incluidos los alimentos que se comen crudos o que fueron manipulados después de su cocción; de moluscos crudos o mal cocinados cogidos en aguas contaminadas y de vegetales, como lechugas y frutas contaminadas; o por las relaciones sexuales oroanales u orogenitales.

La excrección del VHA y, por lo tanto, la posibilidad de transmisión de la infección de una persona a otra, ocurre ya en la segunda mitad del período de incubación (es decir, antes de que comiencen los síntomas) y continúa algunos días después de la aparición de la ictericia (o durante la actividad máxima de las enzimas en los casos sin ictericia). La mayoría de los enfermos no elimina virus después de la primera semana de la ictericia. No hay eliminación crónica del VHA.

Las mejoras de higiene general y ambiental desarrolladas en Galicia en la segunda mitad del siglo XX, hicieron que cada vez fuera menos fácil la difusión de la infección en la población y, en consecuencia, que el número de casos de la enfermedad fuera cayendo año a año hasta conseguir en la actualidad un nivel muy bajo de enfermedad en la población (con muy pocos casos al año) salpicado, periódicamente, con brotes que afectan a un mayor número de personas, como el que ocurrió en 2008 y 2009 entre hombres que tienen sexo con hombres.

Como la infección deja inmunidad permanente, otra consecuencia de la reducción de la difusión de la infección en la población fue que cada año fueron siendo más las personas que no entraron en contacto con el VHA de niños y, por lo tanto, llegaron a la edad adulta siendo susceptibles (es decir, sin inmunidad). De hecho, la encuesta de seroprevalencia realizada en Galicia en 2013 puso de manifiesto que más del 85% de los nacidos de 1984 en adelante son susceptibles, como también lo son el 67% de los nacidos de 1974 a 1983 y el 31% de los nacidos de 1949 a 1973.

La mejor protección frente a hepatitis A es la vacunación. Está recomendada en los contactos estrechos de los enfermos (ver el Protocolo de vigilancia y control en el enlace de abajo) y en ciertos grupos de riesgo (ver el siguiente enlace). En el protocolo de vigilancia y control se pueden consultar las medidas higiénicas en las guarderías y en el ámbito escolar, las medidas higiénicas para las personas que conviven con un enfermo y la prevención de la hepatitis A en los viajes internacionales.

 

En los últimos años, en Galicia ocurrieron dos brotes importantes de hepatitis A, en 2008/2009 y 2016/2018, que afectaron fundamentalmente a hombres que tenían sexo con hombres, que adquirieron la enfermedad durante la relación sexual. Las prácticas con mayor riesgo de transmisión son las relaciones oroanales y orogenitales.

Para evitar la transmisión de la hepatitis A durante las relaciones sexuales entre hombres, la Dirección General de Salud Pública, hace las siguientes recomendaciones a las personas que tienen o prevén que van a tener múltiples parejas sexuales:

1. Vacunación

Acuda al centro de salud donde le facilitarán la vacunación tras comprobar que no la padeció previamente.

2. Siga las siguientes medidas para evitar contagiarse:

- Lave las manos después de las relaciones sexuales (lávese también a ser posible los glúteos, las ingles y el pene).

- Utilice protección en las relaciones sexuales: use guantes de látex cuando introduzca los dedos o la mano en el ano (fisting) y una lámina de látex (tipo dental dam) o un preservativo cortado en forma de cuadrado para el sexo oro-anal. Puede conseguirse una lámina de látex tipo dental dam en los paquetes Mírate de la Consellería de Sanidad. En esta URL se pueden consultar los puntos de distribución gratuita de estos paquetes: http://www.sergas.es/saude-publica/Puntos-distribucion-packs-Mirate

- Utilice un preservativo nuevo con cada persona y uno diferente para cada relación sexual.

- Cubra con un condón nuevo cualquier objeto que utilice en las relaciones sexuales.

- Evite compartir juguetes sexuales sin protección.